Bienvenida e Historia de la Iglesia

La Venerable Archicofradía de la Purísima concepción y la Real Muy Ilustre y Fervorosa Hermandad de Nuestro Padre Jesús del Soberano Poder ecce-homo y María Santísima de las Lágrimas, le da la Bienvenida a esta Iglesia de Santa María de las Lágrimas, y le invitamos mediante este recorrido a conocer tanto la fascinante historia de casi 400 años de este edificio, que es uno de los emblemas de esta milenaria ciudad , como también conocer la Hermandad de las Lágrimas su patrimonio y su estación de penitencia la tarde-noche de cada Jueves Santo.

Antes de iniciarnos en esta aventura que durará unos 30 minutos, le rogamos guarde silencio ya que esta Iglesia es un lugar del culto cristiano dedicado a la milagrosa Virgen de las Lágrimas, y donde se adora a Jesús sacramentado en el Sagrario. Se encuentra en un espacio muy espiritual Por lo que también le invitamos a orar o pedir las gracias que se deseen alcanzar. Si desea tener un gesto de piedad en forma de luz con alguna de las imágenes devocionales que se encuentran en el templo, puede hacerlo a través de los lampadarios o con un velón que se puede adquirir al inicio de la Iglesia.

La historia de esta Iglesia nace en la inmediaciones de la antigua Medinat Wadiash en los albores del 1594 bajo el pontificado de don Juan Fonseca y Guzman, se funda el convento de san Agustín en el edifico contiguo a la iglesia siendo un siglo después en pleno barroco se construyera este templo que daría servicio espiritual al monasterio, cuya planta es de un merito extraordinario que compite con la belleza arquitectónica, destaca portentosa planta basilical imponente fachada y su peculiar campanario en forma de espadaña que soporta tres campanas que se pueden ver y escuchar desde cualquier punto de la ciudad.

Durante el siglo XVII-XVIII fue la época de mayor esplendor de la Iglesia, ya que además de fundarse notables cofradías se adquirieron unas ingentes cantidades de obras de arte en todos los ámbitos, arquitectura, pintura y escultura, pero la suerte del edificio cambió en el siglo XIX con el decreto de José Napoleón con la disolución de los conventos en plena revolución francesa, donde además este templo se convirtió en cuartel general de artillería , lo que supuso la pérdida de todo su patrimonio además de verse afectada estructuralmente con la rotura del paño central del edificio que permitían pasar los cañones hacia la alcazaba .

Una vez terminada la contienda los frailes Agustinos sobre las ruinas recuperaron el convento con la Iglesia pero con tan escaso número de frailes que a los pocos meses se extinguirían la Orden en la ciudad con la muerte del último de ellos , el venerable padre maestro y doctor en teología Fray Felipe antonio Lanzas. Que falleció mientras ofrecía en solitario la santa misa en el ara del altar mayor.

En 1836 con los decretos de exclaustración de Mendizábal se sacó el conjunto arquitectónico a subasta pública acrecentando el deterioro del mismo. y Es hasta 1851 con la firma del concordato cuando la Iglesia recupera el edificio convirtiéndola en seminario conciliar de San Torcuato, dando fruto a Ilustres cleros que fueron ordenados en esta Iglesia y que conoceremos en posteriores exposiciones. Aunque la Iglesia se abandonó durante los años 70 por encontrarse esta en ruina técnica, ya que el edificio no aguantó los desperfectos de la guerra civil española ( 1936-1939) donde administrada por la UGT sirvió de almacén general de víveres, para la población civil , ya con el desprendimiento de la gran cúpula central entre otras grandes pérdidas estructurales, Obligaron al obispo de Guadix Don Rafael Alvarezlara, a una vez terminada la guerra civil concretamente en el año 1949 ha modificar por completo la estructura de la Iglesia.

Construyendo la peculiaridad de “una Iglesia dentro de otra”. Hasta que en 1999 bajo el pontificado del Obispo don Juan Garcia- Santa Cruz, la Hermandad de las Lágrimas procedente de la parroquia de Santiago Apóstol de Guadix, firma un acuerdo con el obispado de Guadix para la cesión de esta Iglesia de San Agustin con el fin de reabrirla al culto para la que fue construida. La nueva Iglesia de Santa María de las Lágrimas con un gran esfuerzo y el trabajo altruista de sus hermanos están recuperando la primitiva iglesia ,con la salvedad de la pérdida de la gran cúpula central, pero sí salvando los muros antiguos que la sostenían y restaurando sus pinturas murales del siglo XVII que podremos descubrir en siguientes exposiciones. Le invitamos a participar en la segunda exposición, donde le mostraremos el verdadero rostro de Jesús de Nazaret y la capilla del Eccehomo.